prologo, primer relato
3 participantes
Página 1 de 1.
prologo, primer relato
Bueno entre todas las cosas que suelo escribir...hace unos meses empece con esta historia, como ademas escribo en otro foro una historia en conjunto (es una escritura de postas) no tuve mucho tiempo para dedicarme por entero a ella. Pero dejo el prologo a ver si les interesa y ver que opinan...
Desde ya gracias por tomarse la molestia de leerlo...no tengan miedo de ser sinceras con las opiniones!
Prólogo
- Aléjenlo de mi vista – dijo con voz cansada.
Inmediatamente sus hombres obedecieron. Tomaron el valioso objeto en sus manos y salieron corriendo por la gran puerta de hierro. Cuando estaba por sentarse en su escritorio uno de sus hombres volvió corriendo.
- Mi señor ¿Dónde quiere que lo dejemos?
- Me da igual, deshaganse de él- dijo con un gesto de la mano que dejaba bien claro el cansancio que adormilaba sus músculos-. Eso si, dile a Hermes que lo mande a la tierra. Ya bastantes problemas nos ocasiono aquí.
Jorge vio cómo su hombre salía apurado y desaparecía en las oscuridades del pasillo. Se presionó las sienes. El dolor de cabeza lo estaba matando. Al fin lo tenía encerrado. Después de tantos años de persecución. Había capturado y confinado a la eterna oscuridad al demonio más poderoso y malvado de Lucifer. Ahora el bastardo estaría furioso. No tardaría en enviar un nuevo demonio para destruirlo. Pero esta vez estaría preparado.
Jonás corría por los pasillos con el paquete aferrado contra su pecho. Entró en el cuarto del Mago sin golpear, cerró y se apoyó contra la puerta con la respiración agitada.
- ¿Acaso no te enseñaron a golpear antes de entrar?- dijo un hombre anciano sentado detrás de una gran mesa de roble, levantó su vista y lo miró por encima de sus lentes
Jonás trataba de hablar pero estaba tan agitado que solo le salían jadeos.
- ¿Qué traes ahí?- ahora el anciano estaba de pie y lo miraba con ojos cautelosos.
- Mi señor, nos pidió que nos deshiciéramos de él…es Gavrael- los ojos del joven soldado se agradaron en una expresión de pánico que dejo muy en claro el miedo que sentía hacia el objeto que tenia entre sus manos.
- Mmm, así que al fin lo tenemos – el anciano se rascó la tupida barba y se acercó a Jonás.
Le extendió la mano para que le diera el paquete. El soldado no lo dudó ni por un instante.
- Mi señor dijo que tenemos que ubicarlo en la tierra – ahora que ya no estaba en su poder el hombre parecía mas relajado.
Hermes trató de sentir la presencia del demonio a través de la gruesa bolsa de arpillera. Podía sentir el odio, la maldad, el poder. El había tenido oportunidad de ver a Gavrael en más de una ocasión y sabía que en estos momentos el demonio estaría muy enfadado. Por el bien de la humanidad este medallón tenía que desaparecer. Pero antes de enviarlo al otro mundo tendría que cambiar su forma. En su forma actual, de medallón, seria muy fácil que escapara. Bastaba con romperlo para que el demonio se liberase. Además, un medallón era un objeto muy llamativo. Sus joyas engarzadas en un diseño cristiano lo harían valer una fortuna. No, debería volverlo un objeto más insignificante.
- Puedes irte Jonás- dijo Hermes y le abrió la puerta al soldado para despedirlo.
Este abandono el cuarto dedicándole una última mirada de preocupación al viejo mago.
- No tienes por que temer, yo me encargare de desaparecerlo – el soldado hizo una breve inclinación con su cabeza y se marchó con paso tranquilo. Hermes midió el peso del medallón en su mano - ¿Qué voy hacer contigo?
Aunque su dios insistiera en deshacerse del objeto no podía mandarlo al mundo de los humanos solo. Era demasiado peligroso. Caminó hasta la ventana y vio como un grupo de querubines correteaba por uno de los jardines. Necesitara a alguien muy poderoso, con los poderes suficientes como para enfrentar y reducir a un demonio el solo. Solo conocía a un ser con esas características.
La decisión estaba tomada.
- Urian – llamó en un susurro para que nadie pudiera escucharlo.
Inmediatamente el cuarto se impregnó de ese familiar olor a sándalo y un aura de paz y tranquilidad pareció iluminar los objetos. El ángel hizo su aparición frente a el. Tenía los restos de una hamburguesa en la mano derecha y una lata de coca- cola en la otra. Por su mirada de odio, si es que los ángeles podían tener esa mirada, Hermes comprendió que había interrumpido su cena.
- Buen provecho – dijo el mago con una media sonrisa al ver que el ángel tenia la boca llena.
- ¿Qué querés? – dijo Urian después de tragar.
- Necesito un favor- antes que el ángel pudiera expresarle su descontento, levantó su mano y le mostró el medallón.
Urian se quedó helado, clavó sus ojos en el medallón y automáticamente hizo desaparecer la hamburguesa y la lata de coca-cola, no sin antes darle un último sorbo. Una sonrisa apareció en el rostro del anciano mago.
- Necesito que lo vigiles..
- ¿Por qué yo?- preguntó midiéndolo con la mirada.
- Porque tu señor así lo quiere
Urian lo miró con desconfianza y Hermes rezó para que no se diera cuenta de la mentira. Obviamente su señor solo hablaba con los santos y estos le transmitían sus órdenes a los Ángeles. Nunca su Dios osaría rebajarse a hablar con un mago. Por más magia blanca que hiciera.
El ángel se cruzó de brazos y lo miró desafiante. Con toda la hermosura que podía tener un ángel Urian era intimidante, tenía esos ojos que cambiaban de color de acuerdo a su estado de ánimo y el pelo negro, a diferencia del resto de los ángeles. Media casi un metro noventa y sus alas extendidas alcanzaban los tres metros de envergadura. Hermes no conocía otro ángel al que le gustara tanto estar en el mundo de los humanos, parecía disfrutar de sus entretenimientos y se había hecho adicto a la comida chatarra y al cine de acción.
- ¿Por qué mi señor te daría el mensaje a ti?
¡Maldición! No tenía una respuesta para esa pregunta. Ahora si que estaba en problemas.
- De acuerdo. La verdad es que nuestro Señor no sabe nada de esto-. Urian arqueó una ceja y comenzó a retroceder- Digo, si sabe – se apresuró a corregir antes de que el ángel huyera- pero…a lo que me refiero es que…Mira,- dijo firmemente-.necesito que me ayudes. Jorge pudo atrapar a Gavrael después de muchos milenios de batalla y…- el ángel se detuvo y lo interrumpió abruptamente.
- ¿Estas queriendo decirme que lo que tienes ahí es al demonio mas buscado en la historia de la cristiandad?- pregunto con voz risueña.
- Se que es difícil de creer, pero si- le extendió el medallón para que pudiera tocarlo.
El ángel puso una de sus manos sobre el precioso rubí que lo adornaba y la retiró inmediatamente como si su contacto lo hubiese quemado.
- ¿Ahora me crees?
Urian lo miro a los ojos.
- ¿Que rol juego yo en esto?
- Bueno después de retirarle la mayoria de sus poderes, Jorge pidió que lo envié al mundo de los vivos- el ángel lo miro horrorizado- lo que necesito es que lo vigiles, solo si detectas alguna irregularidad. Cambiaré su forma para que pase desapercibido así no tendrás que estar pendiente de él todo el tiempo- La postura del ángel pareció relajarse y asintiendo dijo:
- De acuerdo, llámame cuando lo hayas enviado.
- Otra cosa- dijo antes de que el ángel se esfumara-. Nadie tiene que saber su paradero. Nunca.
Urian le dedicó una risa amarga.
- Estas loco si crees que se lo voy a contar a alguien. Me sacarían las alas de manera que hasta un demonio lloraría y me confinarían al mundo de los humanos para morir en treinta o cuarenta años como mucho.
- Creí que te gustaban los humanos…
- Sip, pero después de que nuestro señor me confine definitivamente a ese mundo y muera, ¿Dónde crees que iré después por haberle mentido?
- ¿Entonces porque lo harás?- preguntó el mago curioso. No tenia idea de que los Ángeles podían ser desterrados.
El ángel se tenso visiblemente.
- Eso no te importa- dijo dándose cuenta de que había hablado de más y se esfumó.
Que interesante.
Sorry las errores de ortografía.
Besos!
Lore
pd: el prota se llama Urian, adivinen por quien??? jejeje
Desde ya gracias por tomarse la molestia de leerlo...no tengan miedo de ser sinceras con las opiniones!
Prólogo
- Aléjenlo de mi vista – dijo con voz cansada.
Inmediatamente sus hombres obedecieron. Tomaron el valioso objeto en sus manos y salieron corriendo por la gran puerta de hierro. Cuando estaba por sentarse en su escritorio uno de sus hombres volvió corriendo.
- Mi señor ¿Dónde quiere que lo dejemos?
- Me da igual, deshaganse de él- dijo con un gesto de la mano que dejaba bien claro el cansancio que adormilaba sus músculos-. Eso si, dile a Hermes que lo mande a la tierra. Ya bastantes problemas nos ocasiono aquí.
Jorge vio cómo su hombre salía apurado y desaparecía en las oscuridades del pasillo. Se presionó las sienes. El dolor de cabeza lo estaba matando. Al fin lo tenía encerrado. Después de tantos años de persecución. Había capturado y confinado a la eterna oscuridad al demonio más poderoso y malvado de Lucifer. Ahora el bastardo estaría furioso. No tardaría en enviar un nuevo demonio para destruirlo. Pero esta vez estaría preparado.
Jonás corría por los pasillos con el paquete aferrado contra su pecho. Entró en el cuarto del Mago sin golpear, cerró y se apoyó contra la puerta con la respiración agitada.
- ¿Acaso no te enseñaron a golpear antes de entrar?- dijo un hombre anciano sentado detrás de una gran mesa de roble, levantó su vista y lo miró por encima de sus lentes
Jonás trataba de hablar pero estaba tan agitado que solo le salían jadeos.
- ¿Qué traes ahí?- ahora el anciano estaba de pie y lo miraba con ojos cautelosos.
- Mi señor, nos pidió que nos deshiciéramos de él…es Gavrael- los ojos del joven soldado se agradaron en una expresión de pánico que dejo muy en claro el miedo que sentía hacia el objeto que tenia entre sus manos.
- Mmm, así que al fin lo tenemos – el anciano se rascó la tupida barba y se acercó a Jonás.
Le extendió la mano para que le diera el paquete. El soldado no lo dudó ni por un instante.
- Mi señor dijo que tenemos que ubicarlo en la tierra – ahora que ya no estaba en su poder el hombre parecía mas relajado.
Hermes trató de sentir la presencia del demonio a través de la gruesa bolsa de arpillera. Podía sentir el odio, la maldad, el poder. El había tenido oportunidad de ver a Gavrael en más de una ocasión y sabía que en estos momentos el demonio estaría muy enfadado. Por el bien de la humanidad este medallón tenía que desaparecer. Pero antes de enviarlo al otro mundo tendría que cambiar su forma. En su forma actual, de medallón, seria muy fácil que escapara. Bastaba con romperlo para que el demonio se liberase. Además, un medallón era un objeto muy llamativo. Sus joyas engarzadas en un diseño cristiano lo harían valer una fortuna. No, debería volverlo un objeto más insignificante.
- Puedes irte Jonás- dijo Hermes y le abrió la puerta al soldado para despedirlo.
Este abandono el cuarto dedicándole una última mirada de preocupación al viejo mago.
- No tienes por que temer, yo me encargare de desaparecerlo – el soldado hizo una breve inclinación con su cabeza y se marchó con paso tranquilo. Hermes midió el peso del medallón en su mano - ¿Qué voy hacer contigo?
Aunque su dios insistiera en deshacerse del objeto no podía mandarlo al mundo de los humanos solo. Era demasiado peligroso. Caminó hasta la ventana y vio como un grupo de querubines correteaba por uno de los jardines. Necesitara a alguien muy poderoso, con los poderes suficientes como para enfrentar y reducir a un demonio el solo. Solo conocía a un ser con esas características.
La decisión estaba tomada.
- Urian – llamó en un susurro para que nadie pudiera escucharlo.
Inmediatamente el cuarto se impregnó de ese familiar olor a sándalo y un aura de paz y tranquilidad pareció iluminar los objetos. El ángel hizo su aparición frente a el. Tenía los restos de una hamburguesa en la mano derecha y una lata de coca- cola en la otra. Por su mirada de odio, si es que los ángeles podían tener esa mirada, Hermes comprendió que había interrumpido su cena.
- Buen provecho – dijo el mago con una media sonrisa al ver que el ángel tenia la boca llena.
- ¿Qué querés? – dijo Urian después de tragar.
- Necesito un favor- antes que el ángel pudiera expresarle su descontento, levantó su mano y le mostró el medallón.
Urian se quedó helado, clavó sus ojos en el medallón y automáticamente hizo desaparecer la hamburguesa y la lata de coca-cola, no sin antes darle un último sorbo. Una sonrisa apareció en el rostro del anciano mago.
- Necesito que lo vigiles..
- ¿Por qué yo?- preguntó midiéndolo con la mirada.
- Porque tu señor así lo quiere
Urian lo miró con desconfianza y Hermes rezó para que no se diera cuenta de la mentira. Obviamente su señor solo hablaba con los santos y estos le transmitían sus órdenes a los Ángeles. Nunca su Dios osaría rebajarse a hablar con un mago. Por más magia blanca que hiciera.
El ángel se cruzó de brazos y lo miró desafiante. Con toda la hermosura que podía tener un ángel Urian era intimidante, tenía esos ojos que cambiaban de color de acuerdo a su estado de ánimo y el pelo negro, a diferencia del resto de los ángeles. Media casi un metro noventa y sus alas extendidas alcanzaban los tres metros de envergadura. Hermes no conocía otro ángel al que le gustara tanto estar en el mundo de los humanos, parecía disfrutar de sus entretenimientos y se había hecho adicto a la comida chatarra y al cine de acción.
- ¿Por qué mi señor te daría el mensaje a ti?
¡Maldición! No tenía una respuesta para esa pregunta. Ahora si que estaba en problemas.
- De acuerdo. La verdad es que nuestro Señor no sabe nada de esto-. Urian arqueó una ceja y comenzó a retroceder- Digo, si sabe – se apresuró a corregir antes de que el ángel huyera- pero…a lo que me refiero es que…Mira,- dijo firmemente-.necesito que me ayudes. Jorge pudo atrapar a Gavrael después de muchos milenios de batalla y…- el ángel se detuvo y lo interrumpió abruptamente.
- ¿Estas queriendo decirme que lo que tienes ahí es al demonio mas buscado en la historia de la cristiandad?- pregunto con voz risueña.
- Se que es difícil de creer, pero si- le extendió el medallón para que pudiera tocarlo.
El ángel puso una de sus manos sobre el precioso rubí que lo adornaba y la retiró inmediatamente como si su contacto lo hubiese quemado.
- ¿Ahora me crees?
Urian lo miro a los ojos.
- ¿Que rol juego yo en esto?
- Bueno después de retirarle la mayoria de sus poderes, Jorge pidió que lo envié al mundo de los vivos- el ángel lo miro horrorizado- lo que necesito es que lo vigiles, solo si detectas alguna irregularidad. Cambiaré su forma para que pase desapercibido así no tendrás que estar pendiente de él todo el tiempo- La postura del ángel pareció relajarse y asintiendo dijo:
- De acuerdo, llámame cuando lo hayas enviado.
- Otra cosa- dijo antes de que el ángel se esfumara-. Nadie tiene que saber su paradero. Nunca.
Urian le dedicó una risa amarga.
- Estas loco si crees que se lo voy a contar a alguien. Me sacarían las alas de manera que hasta un demonio lloraría y me confinarían al mundo de los humanos para morir en treinta o cuarenta años como mucho.
- Creí que te gustaban los humanos…
- Sip, pero después de que nuestro señor me confine definitivamente a ese mundo y muera, ¿Dónde crees que iré después por haberle mentido?
- ¿Entonces porque lo harás?- preguntó el mago curioso. No tenia idea de que los Ángeles podían ser desterrados.
El ángel se tenso visiblemente.
- Eso no te importa- dijo dándose cuenta de que había hablado de más y se esfumó.
Que interesante.
Sorry las errores de ortografía.
Besos!
Lore
pd: el prota se llama Urian, adivinen por quien??? jejeje
ka_lyrra- Cazador Oscuro
- Cantidad de envíos : 1042
Reputación : 37
Fecha de inscripción : 19/01/2009
Re: prologo, primer relato
jajaj! por qué será? le queda lindo el nombre
me gustó, Lore. Muy interesante. Espero seguir leyendo!
PD: no encontré errores de ortografía apenas unos poquitos y chiquititos (ya dije, perdonen que sea pesada con eso de los errores, je)
me gustó, Lore. Muy interesante. Espero seguir leyendo!
PD: no encontré errores de ortografía apenas unos poquitos y chiquititos (ya dije, perdonen que sea pesada con eso de los errores, je)
Re: prologo, primer relato
Esta muy bueno. Me gusta este Urian tambien! jejej
amateratsu- Fuente Primordial V.I.P.
- Cantidad de envíos : 239
Reputación : 18
Fecha de inscripción : 13/01/2009
Temas similares
» EL RELATO DEPORTIVO QUE MÁS TE EMOCIONÓ
» TU PRIMER CONCIERTO...
» El primer Cazador Oscuro (DARK-HUNTER) argentino...
» TU PRIMER CONCIERTO...
» El primer Cazador Oscuro (DARK-HUNTER) argentino...
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.